Ignacio Fuentes

Ignacio Fuentes
IGNACIO FUENTES

lunes, 16 de mayo de 2011

El día del chupete.

Ayer domingo el mundo del motociclismo se vistió de bebé. Los pilotos catalanes Maverick Viñales y Marc Márquez subieron a lo más alto del cajón en el Gran Premio de Francia en sus respectivas categorías con tan sólo 16 y 18 años. En la cilindrada pequeña Viñales superó a Terol en la recta de meta por milésimas y logró así ser el piloto más joven de la historia en conseguir una victoria en 125 Cc. Por su parte Márquez,que ya nos tenía acostumbrados a verle arriba del podio el año pasado, venció por vez primera en Moto 2 y también se convirtió en el piloto más joven de la categoría en hacerlo. Asombroso. Estamos ante dos monstruos de este deporte, y sólo son dos niños. 
La cilindrada de 125 parecía estar vista para sentencia. Un hombre, Nico Terol, estaba siendo el claro dominador con tres victorias en tres carreras. Parecía ya imposible que alguien pudiera estar a la altura del piloto  de Alcoy. Pues bien, el jovencísimo Viñales es la gran esperanza para aquellos que todavía quieren ver una categoría apretada en su último año de historia y existencia. Recordemos que el año próximo los 125 centímetros cúbicos desaparecerán junto con los dos tiempos, y se pasará a la categoría de Moto 3, con motores de 400 y cuatro tiempos. Es más que probable que la experiencia de Terol le de el título de campeón, pero ahora con el niño del chupete Maverick tosiéndole detrás, lo tendrá más difícil. 
En Moto 2 la supremacía del alemán Stefan Bradl daba que pensar que el mundial, aunque mucho más apretado por la dificultad de la categoría  donde se encuentran más de 15 pilotos en el mismo segundo, era cosa de dos o tres. Entre ellos, Iannone, Simón o el propio Bradl, que era el claro favorito. Viendo el carrerón de Marc el domingo, con remontada incluída para ganar, habrá que empezar a pensar en el de Cervera para el título. Le falta experiencia con la nueva moto, acumuló tres ceros después de tres caídas en los primeros Grandes Premios, pero si continúa en esta línea, ritmo tiene,  carreras quedan muchas y tiempo hay de sobras para ponerse cerca de los líderes. El primer golpe encima de la mesa lo dio ayer. El año pasado también empezó a ganar en el cuarto Gran Premio, entonces fue el de Mugello. A partir de ahí ya lo  saben. 10 victorias y 11 poles para acabar como el segundo campeón del mundo más joven de la historia. ¿Podrá esta temporada?
En cuanto a la categoría reina malas noticias. Dani Pedrosa se rompió la clavícula tras caerse cuando adelantaba a Simoncelli en la lucha por la segunda plaza. El catalán ya le tenía la posición ganada pero en otra  fea maniobra del de Católica Dani se fue al suelo. Los comisarios penalizaron al italiano con un drive through con el que perdió tres posiciones al finalizar. Dani por su parte perdió muchas de las opciones de cara al campeonato. Todavía no se sabe cómo llegará al GP de Montmeló, si es que llega. Lo que está claro es que una maniobra indebida le ha pasado una mala jugada en la que podía ser su gran temporada. Jorge Lorenzo sigue líder a pesar de acabar fuera del podio y Stoner volvió a repetir victoria y se antoja como el principal rival y favorito al mundial. 

lunes, 9 de mayo de 2011

Rafa Nadal ya no es el número uno

No se molesten, no se enojen. Nuestro deportista más laureado del momento, el mallorquín Rafael Nadal Parera,  sigue estando en lo más alto del ránquing mundial. El colchón de puntos que le separa de su actual perseguidor y rival más temido, Novak Djokovic, es de 1800 puntos, pero se ha reducido enormemente en los últimos torneos, donde el serbio ha derrotado al español en las últimas tres finales que ambos han disputado. Si bien el monstruo de Manacor lidera todavía la clasificación, no lo hace en los puntos acumulados en este 2011, en el cual es Djokovic el que aventaja a Nadal. Esta semana se disputa el quinto Masters 1000 de la temporada en Roma,  tercero en tierra batida, y si nuestro Rafa no consigue alcanzar las semifinales y Novak logra su sexto título de la temporada será este último quien comande la ATP. 
Lo acontecido ayer en la final de Madrid, no hace más que dar la razón al titular de este artículo.Nadal ya no es el mejor sobre una pista de tenis. Ahora hay un ser superior, alguien que está un peldaño por encima de él, que lo ha ganado todo en este 2011: 33 partidos consecutivos, 35 si le sumamos los dos de Copa Davis que le dieron la ensaladera a Serbia en la eliminatoria final contra Francia el pasado mes de diciembre. El estado de forma, tanto físico como mental, de Djokovic es sobrenatural. Estamos ante el super hombre del 2011, ante el tenista invencible. Muchos entendidos en la materia expusieron en su momento que el balance de victorias del serbio se vería truncado cuando llegara la tierra batida a escena. No ha sido así. Segundo torneo de arcilla que juega, segunda victoria. La que si se ha visto cortada es la racha de Nadal sobre tierra, donde no perdía desde Roland Garros de 2009, en aquellos cuartos de final en los que no pudo vencer a Robin Soderling. Ayer hubo un giro inesperado para muchos, esperado para algunos. Las claves del gran juego de Djokovic y de que el fenómeno de Nadal no pueda con él son algunas, y complicadas de cambiar: 

  1. En primer lugar el tenis agresivo del serbio desde el resto no permite al español dominar los puntos. Por contra es su rival quien toma la iniciativa desde el principio.
  2. Ese tenis agresivo permite a Djokovic asentarse en la linea de fondo, o incluso un poco más adelantado con el segundo servicio de Rafa, mientras que el mallorquín golpea cada bola entre dos y tres metros por detrás de la línea de fondo, siendo muy complicada cada devolución. 
  3. El servicio. Mientras el número dos del mundo obtiene puntos gratis con su saque, Nadal apenas los consigue.
  4. La defensa. Desde sus inicios en el tenis siempre se ha dicho de Nadal que era el mejor defensor, y que nunca daba una pelota por perdida. Por suerte esto último sigue como siempre y el de Manacor no da un punto por perdido jamás. Ahora bien, la elasticidad y la gran forma física de su rival es tal, que se ha convertido en un defensor excelente, que llega bien posicionado a cada pelota y golpea con dureza incluso cuando está contra las cuerdas. 
  5. No tiene puntos débiles. Los tenistas suelen tener puntos fuertes y puntos débiles, o no tan buenos. En el caso de Nole, no los hay. Su revés es casi tan bueno o mejor que su derecha, consigue ángulos abiertos con los dos y golpea fuerte siempre. Por el contrario Nadal tiene en su revés un golpe menos bueno, que se cubre constantemente, dejando medio lado de la pista desierto. 
Mucho deberán cambiar las cosas para que la sensación del año baje el pistón, o para que el número uno del mundo pueda con él. Suerte Rafa.