Rafa Nadal y Roger Federer en la entrega de premios. |
Federer salió como un ciclón, y demostró, no sólo ayer sino durante toda la semana, ser el mejor en Londres. Su rival, en rueda de prensa tras el partido admitió que el suizo fue superior: "Siento que he perdido el partido porque he jugado contra un muy buen Roger Federer en una de sus superficies favoritas. Cuando juega así es muy difícil pararle". Es bien cierto. Cuando el ahora número dos mundial tiene unas estadísticas como las de ayer es imposible derrotarle. Él se mostró alegre de volver a ganar el Masters. "Estoy realmente emocionado por haber jugado así esta semana. Ganar aquí por quinta vez es impresionante. Estoy realmente contento por la manera en que he acabado la temporada, jugando mi mejor tenis. Sinceramente creo que puedo hacer otro gran año en 2011". Cuando parecía que Roger no iba a gasnar más títulos llegó a Australia a principios de esta temporada y logró su decimosexto Grand Slam. De la misma manera que empezó el año lo ha finalizado: ganando.
El partido empezó con los dos jugadores manteniedo sus respectivos servicios. Con cuatro a tres en el marcador y Nadal al saque el suizo tuvo dos opciones de break y no las perdió. Mantuvo el saque en el noveno juego del primer set y lo ganó. 6-3. En el segundo Rafa consiguió un break en el cuarto juego y lo mantuvo hasta lograr, con su servicio, la segunda manga. 3-6. En el último y definitivo set Federer mandaba por dos juegos a uno. Rafa tenía un 40/15 a favor y dejó que su rival le voltease el juego hasta quebrarle el saque. Con 3-1 el suizo se hizo más fuerte y no permitió a Rafa ganar más. 6-1 final. Ayer Federer fue superior, logró más winners, erró menos y atención: consiguió ganar con su primer servicio el 92% de los puntos que disputó. En total 37 de 40. Un Federer peRFecto que impidió a Nadal ganar este Masters por primera vez. En otra ocasión será.
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